EZ PRESENTA ALEGACIONES AL SONDEO EN LA GRANJA DE MORERUELA QUE PODRÍA ACABAR CON LA RESERVA NATURAL DE LAS LAGUNAS DE VILLAFÁFILA

El proyecto, que ahora tiene que aprobar la Confederación Hidrográfica del Duero, pretende extraer del acuífero de Villafáfila, según publica la propia Confederación, cerca de 120 millones de litros de agua al año. Esto podría conllevar, en la práctica, a la desaparición de las lagunas, que debido al gran valor natural, paisajístico y faunístico que presentan, son consideradas una Reserva Natural desde la publicación del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (Decreto 7/2005). 

La empresa, UTU Solar  S.L., solicita de la Confederación Hidrográfica del Duero, un sondeo para la concesión de un aprovechamiento de aguas subterráneas, con un caudal previsto de 3,8 l/s., con la única finalidad de producir hidrógeno mediante hidrólisis.

Esta ingente cantidad de agua que ahora pretende extraer la planta, es un bien esencial para la comarca, pone en riesgo otros usos, entre ellos el de agua potable para consumo humano, resulta un atentado muy severo contra la conservación de la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila, una de las lagunas más emblemáticas de la península ibérica y lugar de paso de miles de aves cada año (algo que las convirtió en Zona de Especial Protección para las Aves desde la Resolución de 24 de enero de 2017, de la Dirección General del Medio Natural).
En el fondo de la cuestión no está otro asunto que la red de gaseoductos aprobado por el Gobierno y que tiene uno de sus principales nudos en la provincia de Zamora. Estos gaseoductos, que parten de Huelva, y que transportarán gas natural, pretenden pasar por “verdes” y recibir así los fondos europeos tras una operación de lavado con el Hidrógeno, el cual no puede estar presente en cantidades superiores de alrededor del 5 por ciento dentro del gaseoducto, debido a su alta volatilidad.
Ecologistas Zamora considera que nuevamente nos encontramos ante un caso de extractivismo desmedido, siendo en este caso la materia prima extraída el agua, un bien esencial y cada vez más escaso. Para esta asociación es inaceptable la venta al por mayor que se está haciendo en la provincia, con el silencio cómplice de todas las instituciones, las cuales tendrían que velar por el desarrollo sostenible de los territorios y no por su explotación desmedida y salvaje. Recientes estudios científicos muestran preocupación por el despliegue de renovables en todo el planeta. Trabajos como el de Shen y colaboradores publicado en la prestigiosa revista Energy and Climate Change (enlace), demuestran que la generación de energías denominadas renovables, generan impactos permanentes y severos al medio ambiente, algo que no se refleja en el estudio de impacto ambiental de la planta de Granja de Moreruela presentado por la empresa promotora.
En las alegaciones presentadas, Ecologistas Zamora reitera la obligación de realizar una Evaluación Ambiental seria, en la que se puedan valorar las consecuencias de la extracción hídrica tanto en la Reserva Natural como en la Red Natura 2000. Más, teniendo en cuenta que para el proceso de electrólisis del agua, no solo se necesitará agua, sino también abundante electricidad, para lo cual la planta requerirá una nueva línea de alta tensión. Todo ello apunta a una progresiva y sinérgica afectación al medio ambiente que sin duda tendrá consecuencias nefastas sobre la flora, la fauna y el entorno natural.

Por último, esta asociación recuerda el valor intrínseco del lugar desde un punto de vista patrimonial, al encontrarse justo en la Granja de Moreruela uno de los restos arquitectónicos más relevantes de la provincia: su monasterio medieval, uno de los primeros y más importantes monasterios cistercienses de su época.